jueves, 11 de enero de 2007

Me ha venido a la memoria...


Uno de esos recuerdos que no se sabe bien porqué a pesar del tiempo quedan grabados con tal exactitud que se pueden sentir como recientes.
Tenía yo alrededor de seis años y mi hermano cuatro.
Mis padres, siempre preocupados por los mismos motivos que el resto, me habían advertido que no hablara con extraños, que no aceptara regalos de desconocidos y sobre todo que bajo ningún concepto abriera jamás la puerta, contando de tal manera que una niña lo pudiera entender, que no era nada bueno lo que podía pasar. Y así, un día decidieron hacer la prueba.
Se vistieron, me explicaron que salian un momento y se fueron (sí, mis padres son así).
Al rato sonó el timbre y por unos instantes me quedé quieta.
El timbre volvió a sonar.
Entonces me levante, fuí a la habitación donde jugaba mi hermano y que miraba asustado, lo agarré de la mano y lo escondí conmigo debajo de la cama.
Recuerdo que lo miraba y me ponía los dedos en los labios para que se callara y que allí permanecí quieta hasta que escuche las familiares llaves de mis padres. Entonces salí y mi hermano volvió a su habitación como si de un juego se hubiera tratado.
Desde entonces hay algo que no ha cambiado...Mi hermano y yo vivimos en habitaciones demasiado separadas pero aun así, cuando veo en su mirada algo que le preocupa me dan ganas de agarrarlo y meterlo debajo de la cama hasta que todo haya pasado.
Y cuando no veo eso en su mirada, a veces, me da un coraje de haberlo sacado...

10 comentarios:

hoteles cerdanya dijo...

jaja, linda historia, hay recuerdos que quedan bien grabados en la mente, yo tengo varios recuerdos de mi infancia, algunos de bien pequeña, lo que miraba en la TV mientras acompañaba a mi madre a la noche porque estábamos solas.

aldesa dijo...

Que miedo deben haber pasado, la verdad que muchas veces los padres nos hacen algunas cosas que luego nos cuesta muchisimo olvidarlas!!!

Alan Faena dijo...

Pero eso habla del amor que se tienen como hermanos, es lindo, y es bueno saber que siempre contamos con los hermanos, sentir que hay alguien que nos cuida.

ramin tovfigh dijo...

es una historia graciosa y dulce a la vez, que bueno poder sentir esas cosas por experiencias vividas con los hermanos!

Grupo Aldesa dijo...

es bueno tener esos recuerdos de la niñez que marcan para siempre las relaciones entre hermanos.

Alejandro Betancourt dijo...

Me vinieron a la memoria cosas de mi niñez, me río solo.

Frank Holder dijo...

Es muy bueno que se puedan recordar cosas de la niñez, en mi caso tengo muchos recuerdos bellos

turbo compresor dijo...

Que lindos recuerdos!, las cosas que se hacen en la niñez con los hermanos se recuerdan para siempre!

comunicacion organizacional dijo...

Que lindo es de vez en cuando tener esos hermosos recuerdos de la niñez y tener con quien compartirlos.

turbocompresores dijo...

Que niños tan obedientes!!!!, muy bien, supongo que los padres quedaron felices!